Ante más de medio aforo, se jugó un encierro bien presentado de la ganadería De Haro, propiedad de don Antonio de Haro González , los cuatro fueron bravos pero desafortunadamente les han picado en exceso, los restos del último astado recibieron el reconocimiento del público, cuando el juez le otorgó la vuelta al ruedo.
David Carrasco: Silencio.
Manolo Roldán: Al tercio.
Xavier Gallardo: Oreja.
Oscar Amador: Vuelta.
Detalles: El rehiletero Diego Martínez saludó nuevamente en el tercio tras parear al segundo.
Incidencias: El novillero Juan Pablo Moreno, quien estaba anunciado en este cartel, sufrió el día de ayer un percance mientras tentataba en una ganadería, por lo que fue sustituido por Manolo Roldán.
________________
El ganadero de la dehesa De Haro nuevamente ha justificado que en tierras tlaxcaltecas abunda la sangre brava, el esplendor del toro es lo que todo aficionado desea ver en los ruedos. Los novilleros por su obvia inexperiencia han tomado las clases de mañosos aleccionadores, darles a llenar a las bestias para mermar el peligro, pero esa no es la forma de egrandecer el espectáculo.
Una oreja fue el resultado de este festejo en la plaza de Arroyo, Xavier Gallardo fue el que la consiguió adquirir a base de un buen planteamiento en su faena, aunque el chaval tiene un largo camino que recorrer pues los pases emprendidos, han quedado a medias, también le ayudó llevarse la peluda a la espuerta, el ser certero con el estoque, el cual lo ha dejado hasta las cintas en lugar delantero y caído.
Con suerte nuevamente ha hecho el paseíllo el apizaquense Oscar Amador pues ha pechado con el mejor novillo de la tarde, un novillo con una embestida recia, pero con clase y nobleza que le ha dejado estar al aspirante quien intentó ejecutar las suertes conocidas del torero, con la capa ejecutó la famosa gaonera estilo tomasino. Gallardo pero con sentido del torero estuvo el tlaxcalteca a merced del bravo novillo que le exigió el carnet. El acero lo ha traicionado y tuvo que conformarse con la vuelta al redondel.
Detalles novilleriles volvió a dejar en el albero de Tlalpan Manolo Roldán, un torero que conecta rápido con el público, con esos tirones añejos, con la diestra y siniestra estuvo insistente sin lograr ligar las tandas. Con el acero tampoco tuvo suerte y su salida al tercio se vio más forzada que ganada.
El novillero que abrió plaza David Carrasco tuvo la puntada de recibir a su novillo a porta gayola, reconociéndosele más su valor que la ejecución, lamentablemente poco se le ha de recordar, pues su poco aguante le impidieron hacer todo, amen que le mataron a su novillo en varas. En otra oportunidad quizás no será tan interesante verle.