Se tentaron 8 becerras de las cuales 5 tuvieron exelente nota de tienta, 2 resultaron buenas y una se fue directo al rastro. El matador capitalino quien con su experiencia y su toreo hizo ver las exelentes cualidades de las futuras madres de la ganadería, Adrián hizo un toreo pausado y cada becerra que toreo se encelaba con su poderosa muleta.
Para el matador Adrián Flores, esta tienta le sirvió de preparación para sus compromisos en la Península de Yucatán.
Al final de la faena de campo, el ganadero deleitó a sus invitados con una sabrosa comida.