‘Son estruendosos los olé de esa plaza que a uno como torero lo hacen sentir, la verdad estuve muy a gusto con el novillo de la Llave, al que disfruté en especial por el lado izquierdo, creo que al torear por ese lado me sentí mejor y me di cuenta que la gente apreció lo que traigo adentro, pero estoy molesto conmigo mismo por fallar a la hora de la espada, sé que fuera otra la historia si hubiera dado la vuelta al ruedo con la oreja en la mano’, dijo el novillero potosino.
Al siguiente día el novillero se puso a entrenar, pues dijo estar consciente que para él tarde a tarde es una guerra, pues quiere ser alguien importante en la fiesta brava.
‘Hablé con mi apoderado el matador de toros José Briones, quien luego de regañarme me hizo ver mis errores, en los cuales ya estoy trabajando, pues hay que darle vuelta a la página, pues el sábado estamos anunciados en Juriquilla y luego vendrá otra tarde importante’.
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